🌌 ¿Para qué estamos aquí?

Siempre me he preguntado por el propósito de la vida. ¿De dónde venimos?¿Para qué estamos aquí? ¿Existe una fuente creadora, misteriosa, omnipotente, omnipresente…? ¿Es acaso un Dios que envía pruebas, que castiga, que tiene forma de hombre? ¿O será que no fuimos creados a su imagen y semejanza, sino que fuimos nosotros quienes lo imaginamos así? ¿Y por qué tendría que ser hombre? ¿Sería distinto si fuera mujer? ¿O quizás no tiene género, ni rostro, ni forma? A veces creo que Spinoza tenía razón… ¿Y si Dios fuera la naturaleza misma, sus leyes, su orden perfecto, su caos sagrado? 🌿✨

Me pregunto qué significa, en realidad, ser bello. Ser rico. Ser pobre. Ser feliz. Estas preguntas han estado —y siguen estando— en mi cabeza de manera constante, como un murmullo que nunca cesa.

La verdad es que aún no tengo las respuestas. Pero si algo he aprendido con los años, es que hay una certeza que se mantiene: Venimos a servir.

A convivir. A aprender a amarnos incondicionalmente. A perdonarnos… y a perdonar. A expresarnos, a compartir, a cuidar de nuestra madre tierra 🌎y a conectarnos con el universo, con sus misterios, sus señales, sus silencios. 🌌

Lo único cierto es que el dolor y el sufrimiento no distinguen género, raza ni clase social. Todos, en algún momento, nos enfrentamos a pérdidas, a enfermedades, a vacíos, a crisis del alma… 😔

¿Y entonces, qué nos queda?

Vivir el día a día. Estar en el presente. Porque ni al ayer ni al mañana tenemos acceso por más que algunos insistan en adivinar lo que será. Solo tenemos el ahora 🕯️

Nos queda cuidarnos. Cuidar a los demás. Cuidar lo que nos rodea. Ser compasivos. Ser honestos. Ser amorosos. Buscar ser mejores personas. Agradecer. Hacer el bien, simplemente porque está bien.

Está bien estudiar, trabajar, emprender, viajar, comprar pero al final, todo eso no llena el alma. No calma el silencio ni abraza la soledad.

💛 Solo el amor —el verdadero, el que nace de uno mismo y se extiende al otro—solo el servicio, y solo la capacidad de mirarme y mirar al otro con ternura, tienen el poder de dar sentido.